Meta

En este proyecto de interiorismo para la clínica psiquiátrica y psicológica Meta, el punto de partida fue el respeto hacia la esencia arquitectónica del espacio. Lejos de ocultar su carácter original, decidimos potenciarlo, conservando los muros de ladrillo visto y dejando a la vista las imponentes vigas abovedadas que conforman la cubierta. Esta decisión no solo preserva la historia del edificio, sino que además otorga identidad y singularidad al conjunto, generando un entorno con gran personalidad.

Para conseguirlo, los cubículos destinados a los diferentes despachos se diseñaron con una altura inferior a la del techo principal, de modo que las vigas pudieran apreciarse desde cualquier punto del interior. Esta estrategia espacial no solo mantiene la continuidad visual, sino que también amplifica la sensación de amplitud, contribuyendo a un ambiente más sereno y acogedor. 

El programa de la clínica se compone de cinco despachos privados, tres baños, una cocina, una sala de usos múltiples y un área especialmente diseñada para niños, concebida con un enfoque lúdico y terapéutico. Cada espacio se proyectó con la premisa de aportar comodidad, funcionalidad y calidez, creando un equilibrio entre profesionalidad y cercanía.

Como valor añadido, el proyecto incluye una terraza que fue transformada en un área de bienestar, destinada a actividades de relajación como yoga y meditación. Este espacio exterior, abierto y conectado con la naturaleza, ofrece a pacientes y profesionales un entorno de desconexión que refuerza el vínculo entre arquitectura, bienestar físico y equilibrio emocional.

El resultado final es una clínica que combina autenticidad arquitectónica y diseño contemporáneo, creando un lugar inspirador, funcional y humano, pensado para acompañar procesos de cuidado psicológico y psiquiátrico en un entorno único.